Las autoridades de Tierra del Fuego trabajan en la planificación de infraestructura para impulsar el turismo en el Parque Nacional Yendegaia, en el extremo sur de la isla. En el marco del anuncio gubernamental sobre la finalización de la senda de penetración para 2031, se busca convertir antiguos botaderos del Cuerpo Militar del Trabajo (CMT) en miradores estratégicos que permitan apreciar la riqueza paisajística de la zona.
Infraestructura y desarrollo turístico en la última frontera
Desde 1995, el CMT ha utilizado áreas fiscales dentro del parque como botaderos de escombros y campamentos de operación para la construcción del camino de acceso. Ahora, con la consolidación del turismo en la comuna de Timaukel y la instalación de servicios ambientales como el Servicio Nacional de la Biodiversidad y CONAF, estos terrenos adquieren un nuevo valor estratégico.
Ante el incremento de visitantes nacionales e internacionales, la Secretaría Regional de Bienes Nacionales comenzó a fiscalizar estos sectores, evaluando su potencial para proyectos de infraestructura turística. Actualmente, estos sitios se encuentran en proceso de recepción por parte del Servicio de Evaluación Ambiental y pueden observarse a un costado del camino tras cruzar el río Azopardo en dirección sur.
Autoridades impulsan visión de futuro para el turismo en Yendegaia
El alcalde de Timaukel, Luis Barría, facilitó la visita en terreno del equipo ministerial mediante un recorrido en bus junto al delegado provincial, José Miguel Campos, y el administrador municipal, José Barría. Durante la inspección, se analizaron opciones para la instalación de nueva infraestructura pública y la atracción de inversiones privadas enfocadas en el turismo de intereses especiales.
Sergio Reyes, Seremi de Bienes Nacionales, destacó la importancia de estos terrenos en el desarrollo sustentable del área:
“Hemos llegado hasta el final del camino que el Cuerpo Militar del Trabajo ha desarrollado en el Parque Yendegaia, visitando dos de los botaderos que queremos poner en administración con proyectos que generen seguridad económica y desarrollo sustentable, acorde a la visión del gobierno del presidente Gabriel Boric. Nos hemos coordinado con el Ministerio de Obras Públicas para definir el plan de cierre de los trabajos y avanzar en nuevas etapas”.
El delegado provincial José Miguel Campos resaltó la relevancia de anticiparse a las necesidades del turismo en la región:
“La ruta a Yendegaia es una de las más hermosas de la región y del mundo, por lo que es fundamental desarrollar una visión de futuro. Primero, por su entorno natural único y sus dimensiones; y segundo, por la necesaria instalación de servicios para quienes la recorrerán y para la institucionalidad que protege el patrimonio natural del país”.
Por su parte, el alcalde Luis Barría valoró la presencia de autoridades en terreno para visualizar el potencial del territorio:
“Es clave contar con una planificación que combine la inversión privada con la apertura de nuevos espacios para el ocio y la recreación de los habitantes fueguinos. Junto al administrador municipal hemos trabajado en un circuito de hitos turísticos que complementan iniciativas binacionales como la Ruta del Fuego”.
Prevención de incendios en un ecosistema vulnerable
El crecimiento del turismo en la zona también trae desafíos ambientales. Las autoridades alertaron sobre la fragilidad del ecosistema y el aumento del tránsito por el paso Río Bellavista. Según estimaciones del municipio, alrededor de 7.000 personas visitan anualmente la zona, con 3.000 de ellas dedicadas a la pesca deportiva y otros aventurándose hacia Caleta María, Lago Fagnano y la entrada del Parque Yendegaia.
El alcalde Barría subrayó la necesidad de adelantarse a los impactos que el aumento de visitantes traerá: “Es el momento de conversar sobre cómo anticiparnos a lo que viene”.
En este contexto, el Seremi de Bienes Nacionales hizo un llamado a la conciencia ambiental, señalando la reciente detección de fogatas bajo el puente de hierro del Río Azopardo como un ejemplo de prácticas que ponen en riesgo la seguridad de las personas y el patrimonio natural del parque, que abarca más de 100.000 hectáreas.
La planificación y protección del Parque Yendegaia continúan su avance de la mano de la inversión en infraestructura y el fortalecimiento de medidas de conservación, consolidando a esta zona como un destino clave para el turismo de naturaleza en la Patagonia chilena.